domingo, noviembre 25, 2012

¿Y si empezamos?

Ya han pasado algunos meses. La tristeza ha dejado de pesar. La melancolía no me acompaña a todos lados y el peso de no tenerte, ya no me agujerea el estomago. 

Ya no me haces sentir. Ya te alejé de mi corazón y de mi mente...

Me pregunto: "¿Y si empezamos?" Pero no puedo. Quiero seguir. Lo deseo más que nada. Continuar. Seguir con mi vida, como antes siempre hacía. En apariencia si que lo hago, pero por dentro...muero de miedo. ¿Volver a caer?¿ Más dolor? Son palabras que se meten en mi mente y me paralizan. Querer y no poder.

Deseo volver a empezar. Desde Cero. En otro sitio, con otra gente. Explotarme en mil pedazos y volver a comenzar. Pero este puto miedo no me deja seguir. Se me queda en la boca del estomago, en la punta de la lengua, en la sonrisa a medio hacer, en la mirada huidiza...Entonces, bajo los brazos, y pienso "Para qué?" y ese "¿Y si empezamos" se hace chiquito....hasta desaparecer.



jueves, noviembre 01, 2012

A mis 30

Cumplo 30 años. Si me cuesta decirlo en voz alta, imagínate escribirlo. 30 años...

Hoy es tiempo de celebración pero también de reflexión, de nostalgia y de echar la vista atrás. En todo este tiempo ¿qué he hecho? ¿qué tengo o no tengo? ¿qué debería tener o haber realizado? Preguntas que se quedan en el aire con un punto ácido y dulce, ácido porque lo pasado ya se fue, dulce por todo lo vivido.

Como en la vida de cualquier persona, la mía no iba a ser excepcional, he vivido muy malos momentos, momentos malos, regulares, días normales, días buenos, días increíbles y días de esos que llaman " el día menos pensado...". Mi vida no ha ido especialmente fácil, ni muy normal...digamos que en la ruleta de la vida es lo que me ha tocado. Hay cosas que no dependen de nosotros y que no podemos cambiar. Esa ha sido la parte más mala de mi vida, y sé que lo seguirá siendo. Pero, quizá eso también ha sido lo que me ha hecho ser como soy, lo que me hizo más fuerte, lo que me dio el valor y las fuerzas para revolverme contra la injusticia, para luchar contra eso que "me ha tocado pasar...".

He cambiado. No soy la misma persona que cuando tenía 20 años, ni siquiera con 27...Atrás quedó la inocencia, la ilusión y la creencia que las cosas con el tiempo serían mejores, que conseguiría el empleo de mis sueños, me independizaría, encontraría al amor de mi vida y toda la historia que nos vendieron a la gente de mi generación. Esa que ahora llaman perdida...

Atrás quedó la niña con timidez patológica de 8 años, atrás quedó la adolescente eternamente enamorada en secreto de 15 años, la que escribía a todas horas y nunca dejaba de soñar..

He cambiado. Los que me conocen lo saben. Si me preguntan cómo lo hice...no tengo la respuesta. Los años, la vida, las experiencia, los amigos, pero sobretodo las ganas de revelarme contra el mundo, mi mundo, ese del que creía que no podía salir nunca...

Ya no soy esa niña, ni esa adolescente pero en ellas me veo reflejada algunas tardes como esta. Quizá me llevo lo mejor de cada una de ellas.

Si tuviera que hacer una lista con todo lo que aprendido, no terminaría nunca...Son tantas cosas...Y sigo aprendiendo y lo seguiré haciendo. Esa es una de las pocas cosas que con certeza sé. Seguiré aprendiendo, equivocando, cayendo y volviendo a resurgir.

He luchado, me he caído cientos de veces y me he vuelto a levantar. He decepcionado, me han decepcionado. He querido. He amado. Me han querido y también me han dañado. He hecho daño. He pensado que iba a morir de desamor, que de aquello no se podía salir,...y he resurgido. He perdido la esperanza para volverla a recuperar una y mil veces.

Estudié una carrera sin futuro ( aunque en esta tierra mía, ya empiezo a dudar que es lo que tiene futuro), he tenido trabajos de todo tipo, me han despedido. He cambiado de sector. Aprendí de forma autodidacta y luché por salir de ese círculo vicioso y sentido. Aún sigo luchando...

He conocido a gente de todas partes del mundo, he tenido a amigos de los que hoy ya no sé nada, amigos fugaces, de unos años, o que se pierden por el camino, otros que dejas atrás, los que descubres que no merecían la pena, o que no eran tan reales, pero también conservo amigos desde el colegio, de esos de "toda la vida", amigos del instituto que se fueron a otras ciudades, o a otros países...esos que ni la distancia a conseguido perder. Y luego están los de "verdad" esos que están ahí en los peores momentos, en los mejores, los que te sacan una sonrisa cuando quieres llorar, los que lloran contigo cuando no puedes más...esos que se pueden contar con los dedos de una mano, los más valiosos.  Los que me han visto crecer, evolucionar, cambiar, llorar de tristeza, de emoción, los que han visto como me partían el corazón, una y otra vez, los que me han visto recomponerme, esos que son parte de mi cuerpo, sin los que no sabría como vivir, como seguir...

Hay otras veces, en los que la vida, a veces, te pone en tu camino a gente maravillosa, gente que un día, conoces en la otra parte del continente y que se quedan en tu vida, y ya forman tan parte de ella, y sin conocerlos, ya es como si siempre hubieran estado ahí.

Cumplo 30 años. Hoy dejo atrás una etapa en mi vida. Cierro una ventana, y abro otra. Una más grande. Sigo sin saber nada, sigo queriendo aprender. Sé que volveré a caerme, que volverán a hacerme daño y que no estoy a salvo. Pero es lo que quiero. En eso consiste la vida. Y hoy, más que nunca, tengo ganas de seguir. Con toda la ilusión, todo el miedo y todas las ganas del universo.

* A mi gente, porque vuestra sonrisa es lo que me hace seguir.